Cómo citar este árticulo
Herrera Ramírez D. APS: la revolución fue controlada. Práctica Familiar Rural. 2018 noviembre; 3(3).
 |
 |
 |
| VER TODO EL ARCHIVO |
EDITORIAL
APS: la revolución fue controlada
Herrera R. Diego[a]
a. Saludesa Santo Domingo
DOI: https://doi.org/10.23936/pfr.v3i3
Hace cuatro décadas un nuevo discurso medico remese la medicina dedicada a las enfermedades, amplia la visión de la salud incorporando a la comunidad y a los determinantes del proceso salud-enfermedad en el análisis médico.
En los años ochenta, ambiciosamente representantes de todo el mundo señalaron que la salud de la colectividad estaría determinada por sus condiciones de consumo y el cambio de estos evitaría todas las enfermedades. Y plantearon una estrategia compleja, para lograr “salud para todos en el año 2000”, esta meta positivista, obligo a todos los estados, a extender las coberturas de salud para toda la población.(1)
Luego de 40 años de Alma Ata, se volvieron a reunir, y proclamaron que se tomarían acciones mucho más audaces para cumplir con la promesa anterior, pero la realidad es que el mundo cambio y existen muchos obstáculos o problemas impredecibles en el siglo pasado, que debe superar la atención medica renovada:
Existe evidencia que el aumento de coberturas de servicios de salud no necesariamente produce disminución de la mortalidad. Un estudio analizo el impacto de la cobertura universal de salud en varios países, comparando la mortalidad por 61 patologías o condiciones de salud tanto en países del primer mundo como países de bajos recursos económicos, descubrio que la mortalidad sigue siendo peor en la pobreza que en el primer mundo a pesar del incremento de las coberturas de salud. Los autores, cuestionan las políticas enfocadas en la cobertura universal, sin tomar en cuenta la calidad de los servicios. (3)(4)
Kruk y Muhammed, afirman que sin calidad los sistemas de salud son ineficaces y el objetivo de desarrollo sostenible que dice garantizar la salud y promover el bienestar para todos, en todas las edades, no podrá ser logrado. (5)
Los diagnósticos que los médicos realizan en el primer nivel de atención, son frecuentemente incorrectos y la toma de decisiones es apresurada. La falta de respeto hacia los pacientes es un lugar común. La comunicación con los pacientes suele ser deficiente y abusiva, las lesiones derivadas de la mala práctica son frecuentes, Los tratamientos médicos que los pacientes reciben no están basados en la evidencia, no solo por falta de capacitación de médicos y enfermeras sino también por cuestiones financieras. (5)
La comisión para la Educación Médica en los Estados Unidos del Siglo XXI, proclama que la educación médica no se mantiene al día con los retos de salud a nivel global, principalmente por un currículo medico fragmentado, no actualizado, y estático que produce profesionales en salud sin las competencias necesarias para cumplir todas las demandas de la atención primaria de salud.(7)
La garantía de calidad no debe ni puede estar limitado a los órganos rectores de los Sistemas de Salud, debe impregnar todas las infraestructuras nacionales, obras públicas, transporte, educación, defensa, formación de profesionales.(6)
La gente es la base del éxito de un sistema de salud, sin este compromiso ético, no puede existir un servicio de alta calidad. Mientras los seres humanos sean invisibles y solo sean vistos como un número para incrementar las "coberturas", no es posible brindar una atención de calidad. La APS es imposible de aplicar en Sistemas de Salud burocráticos, al igual que en sistemas de salud privados atados a las leyes del Mercado.
Ante esta realidad la tarea consiste en dudar de todo, “deconstruir” la llamada Atención Primaria de Salud, entendiendo esta deconstrucción como desestructurar, descomponer, o dislocar las estructuras que sostienen la arquitectura conceptual de la APS y de su secuencia histórica; explicitando los cimientos del pragmatismo médico y el utilitarismo político que desvirtuaron esta propuesta, adaptando un proceso que empezó siendo revolucionario, en un discurso más de la medicina hegemónica y de la tradición del pensamiento lineal y positivista de la medicina.(8)